miércoles, 3 de febrero de 2016

LA SUELTA DE FRANCESC

SUELTA

Ya hace algunos días que tengo el autogiro en Igualada y Marcos ha venido a hacerme algunas clases para que cogiera confianza; hasta que llegó la hora de la verdad. Ya iba siendo hora de perder los miedos y coger los mandos solo. La intención era volar el domingo pasado, que acostumbra a ser un día con poca afluencia en el aeródromo. No llegué muy temprano y entre repostar la máquina, limpiarla un poco y revisión pre-vuelo se hicieron las diez y cuarto; miré alrededor y había bastante gente. Como que no estoy para exhibiciones, decidí posponerlo para otro día.
Hasta el jueves no tuve la oportunidad de escaquearme, así que por la mañana miré la webcamp desde casa: manga muerta. Llegué al campo sobre las diez y aquello ya era otra cosa. Manga casi horizontal a ráfagas y viento cruzado a pista, y en aumento. La única ventaja respecto al domingo era que no había nadie, pero tampoco me convenció, o sea que cogí el coche y mañana será otro día. Y efectivamente el viernes, que ya llegué antes de las nueve y me acompañaba mi hija (que una cosa es que haya poca gente pero tampoco hace falta que no haya nadie), manga muerta, pero estaban hinchando un globo en la cabecera de la 17 y decidimos que mejor otro día.



Finalmente, el domingo antes de las nueve, otra vez en el aeródromo, en la zona sur algo de movimiento, pero yo a lo mío, saque el autogiro, que ya estaba repostado y a punto, un pre-vuelo rápido, cuatro puntos de seguridad, que ya lo había hecho el jueves, cerrar la puerta del hangar, casco, cinturón, starter y motor de arranque, lo había arrancado pocas veces, y me pareció que se revolucionaba mucho, con lo que saqué starter, y se me caló. Pero no pasa nada, lo intento de nuevo, y lo mismo, revoluciones altas, intento sacar el starter más despacio, pero sin mejor suerte. Tercer intento, aquí ya no hubo manera, salía un aviso de LOW POWER en el flydat, y máquina bloqueada. La ventaja es que en este mundo no estamos solos, pero para llamar a alguien, un domingo a las nueve de la mañana, tampoco es necesario, de manera que envié WhatsApp a los colegas, y mientras esperaba alguna respuesta, llegó Juan Carlos, que enseguida vino a ayudarme. Después llegó la respuesta de Marcos y entre todos arrancamos la máquina. Mientras cogía temperatura el motor, Juan Carlos me dio los últimos consejos, Marcos desde el móvil también. Pruebas de radio, notifico que entro en pista para ir al punto de espera de la 35, una vez allí, pruebas de encendidos y de bombas. Antes de entrar, un repaso mental de los procedimientos y solicito permiso para entrar en cabecera de 35 para prelanzamiento y despegue inmediatos, a lo que nadie contesta. Una vez en cabecera, bien centrado, pedales rectos, saco frenos de derecha a izquierda, prelanzando hasta 125 vueltas, palanca atrás y al llegar a las 230, soltar palanca del prelanzador. Incrementando gas hasta tope, control de pie derecho, palanca adelante, y al aire… He de reconocer que perfecto no fue, pero por el temor que tenía, tampoco había para tanto. Un circuito y la toma ya fue otra cosa, aquí sí que estuvo mejor, tal vez faltó algo de pie derecho, pero como dice Marcos, ya iremos afinando el punto de mira. Otro despegue y a dar una vuelta, el día estaba revuelto y tampoco daba para mucho, con lo que decidí volver al campo, toma final y hangarar.


Quiero agradecer a todos los que me habéis apoyado esta temporada y me habéis animado a seguir volando.

PILOTO: 
FRANCESC SARRIES