Queridos amigos y lectores tal y como os ha contado Juan Carlos en nuestro primer tramo dormimos en Oviedo, después de una noche llena de fotos y paseos decidimos acabar la noche con la última copa y siguiendo el consejo del conserje del hotel, nos ponemos en marcha buscando el sitio recomendado, una vez a la vista,nos miramos todos y un pensamiento colectivo nos invade ¿pero esto que es? Un montón de luces rojas y chicas en pantalón corto, creo que este tío se ha equivocado,luego pensando lo entendimos, cuando le preguntamos por un sitio para tomar la última copa, las tres copilotos no estaban presentes, bueno, cambiamos de sitio y después de una charla del vuelo de mañana nos vamos a descansar. Un nuevo día nos reúne en el hall del hotel y después de desayunar con el taxi esperando en la puerta nos dirigimos al campo para iniciar una nueva etapa, llegamos a La Morgal donde habíamos dejado los aparatos hangarados y con muy buen acierto siempre repostamos al llegar a los campos que hemos visitado.
Una vez pagadas las tasas hangarage y vestidos con el traje de luces rodamos a cabecera y motor y al aire ponemos rumbo a la costa siguiendo las indicaciones de los locales de por donde esquivar el CTR y pasados unos cuantos minutos se abre ante nuestro ojos la impresionante costa del Cantábrico aunque el día no estaba del todo despejado la visibilidad era buena y se podían apreciar los colores del fondo en toda la costa debido a la extraordinaria transparencia de las aguas, un vuelo serpenteante por toda la costa nos permitió disfrutar de todos los detalles de la costa, aunque utilizase un millón de palabras para describirlo, no haría honor a la realidad, así que,os ánimo a vivirlo,después de un buen rato de éxtasis de vuelo y con una niebla en el orizonte que nos iba reduciendo la distancia de enfoque visual, tenemos a la vista el campo de Ribadeo, Sres. esto si que es una pista, larguísima, anchísima, firme en buen estado y a nivel del mar, todo una lujo.Después de las comunicaciones de rigor y nadie en circuito de uno en uno entramos en circuito y al suelo, saltos de alegría y abrazos con los colegas por las imágenes que acabamos de presenciar hacen el final de esta etapa. Josep ata el savanna al suelo y Juan Carlos y yo rodamos con los autogiros hacia el hangar donde muy amablemente Jose Luis nos ha dejado guardar para que la brisa marina y la humedad de la noche no causé alguna avería a nuestros niños. Después de llamar al taxi e ir a buscar gasolina para repostar nos marchamos en busca de nuevas aventuras esta vez en el suelo, quiero decir que me pareció una ciudad ideal por el tamaño que tiene, es pequeña pero no le falta de nada y súper tranquila, llegamos al hotel y a comer, pasado un rato aparece en escena una persona excepcional el director del campo de vuelo Sr.Miguel Díaz Rodríguez una persona que ha marcado nuestra estancia en esta ciudad, por la noche, imaginaros el resto comida a lo grande, yo iba con la idea de perder peso y ha sido todo lo contrario, paseos por el puerto hasta un restaurante que domina toda la ría, cena con productos de la tierra regados con buen vino, brindamos por los presentes y recordando a los amigos que no han podido estar agradecemos a la vida por ser tan afortunados y compartir estos momentos con nuestros maravillosos amigos. Volviendo al hotel y por un recorrido tortuoso entre casas centenarias en ruinas Juan Carlos amparado por las sombras de la noche se escondió en una de esas ruinas y al paso de las féminas les puso la adrenalina al borde de la meada con un susto sorpresa, coño hasta yo me asuste, risas y definiciones de partes corporales masculinas le llovieron al socio, pero estuvo genial. Una vez en el hotel la charla del día siguiente nos escamaba un poco,el tiempo no nos da tregua, cubierto con muy poca visibilidad, se espera una pequeña mejoría hacia medio día. Todos en pie después de desayunar en casa de Ramón " Mediante" viene a buscarnos Miguel y un taxi nos acercan al aerodromo,al llegar, un montón de coloridos aeromodelos revolotean la pista, una gente encantadora que sacia nuestra curiosidad sobre estos aparatos, que con tanto cariño como nosotros vuelan, correspondemos sus preguntas, nos preparamos y después de calentar, motor y al aire rumbo a Villamarco una vez en vuelo con la patrulla todos a la vista comenzamos a subir intentando buscar un paso que nos permita alcanzar nuestro nuevo destino, después de cuarenta km e innumerables giros y búsqueda de cielo abierto acabamos en una olla entre montañas con una visibilidad de 50 mtrs decisión unánime media vuelta y otra vez al campo imposible pasar y cada minuto que pasa se cierra más, teníamos pensado ver una zona que la llaman las catedrales y era tan mala la progresión de visibilidad que decidimos asegurar el tiro, a derecho a la pista. Otra vez aquí, llamada por teléfono a Miguel que con una paciencia de santo, nos acompaño a repostar y hangaramos detrás de su avión, buscar habitación y retorno al hotel, y ya sabéis más navajas............. Una sensación de inquietud nos invade Patricia y LLorençestán en La Morgal y no pueden pasar y nosotros no podemos salir, dependiendo del tiempo descartamos el paso directo a Villamarco y como las previsiones son un poco mejores hacia el este, optamos por volver sobre nuestros pasos hacia La Morgal y desde allí los cuatro jinetes saltar por Pajares, bueno mañana ya veremos. Al día siguiente Juan Carlos habiendo contactado con Marcos y con Paco de La Morgal y de Sebares respectivamente para coordinar el reportaje en nuestra vuelta deciden unirse a nuestra patrulla y quedamos para reunión en Ribadeo, otra vez entra en escena Miguel que nos vuelve a llevar al campo sacamos los aparatos y preparamos todo esperando a los colegas que vienen a nuestro encuentro, inquietos por las condiciones meteorológicas nos parece una eternidad la espera, hasta que un rumor de motor y rotor suenan en el horizonte ya están aquí, aterrizan y como niños,otra vez esa alegría nos invade saludos y abrazos, después de solucionar algún que otro asuntillo, en fila India a cabecera y al aire uno detrás de otro, siguiendo la costa hacia La Morgal ,una imagen preciosa tres rotores delante y surfeando las olas, con J.C de líder esquiábamos el CTR y rumbo directo hasta la pista donde nos esperan Patricia y LLorenç,después de repostar rodamos a cabecera y otra vez al aire dirección a Villamarco vía puerto de Pajares, que está alto de huevos, Lorenç nos hace de guía adelantándose un trozo e informando de la ruta y de las condiciones de barlovento y sotavento que nos encontraríamos en el camino. Poco a poco vamos ganando altura hasta que tenemos el paso al alcance y saltamos, el cambio de clima fue evidente, las nubes desaparecieron totalmente y el sol iluminaba nuestro camino, a cuarenta minutos de Villamarco variamos un poco el rumbo para pasar sobre el pueblecito donde vamos a dormir y un poco más adelante otro pueblecito donde viven mis padres Armando y Sara, al sentir el rugido de las máquinas salen todos a saludar y el corazón se me encoge al verles, que felicidad ya estamos en casa, pues aquí es donde yo me crié Candanedo de Vegaquemada, pasados 20 minutos campo a la vista y y todos al suelo. Nos esperaban mi hermana y un amigo para llevarnos hasta unas Cabañas de madera en las que íbamos a pasar la noche, al pasar por el pueblo de mis padres nos habían preparado una merienda cena, de la que puedo decir que disfrute como nunca, la familia y los amigos, todos juntos, un lujo. Se nos hicieron las tantas y me hubiera quedado otro tanto pero había que madrugar, llegamos a Vegaquemada a las Cabañas y sorpresa son alucinantes,pequeñas pero muy acogedoras y con SPA,Dios mío la gente se vuelve loca, todos se quieren meter en el agua, no hemos traído bañador pero eso no importa la gente se anima el resto imaginaroslo ...................................... Nos fuimos todos a dormir, el baño al día siguiente, que asco es ser tan civilizado. Mañana salimos de Villamarco hacia Valle Ambles pero eso es otra historia Quiero deciros que cuando ha tocado que Juan Carlos o LLorenç hagan de líder en la formación,los que vamos detrás volamos muy relajados pues se preocupan de los que les preceden avisando en todo momento de lo que te vas a encontrar y sé por propia piel que esto hace pierdas detalles del vuelo. Muy bien hecho TÍOS.
REDACTADO POR: PATXI RODRIGUEZ-AUTOGIRO AMARILLO
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