VIAJE RELAMPAGO A LUMBIER (VUELTA)

Después de un viaje de ida a Lumbier movidito con viento de cara desde Igualada, entre 25 y 35 millas, un recibimiento caluroso de nuestros amigos nos hizo olvidar los sobresaltos del viaje.

Cenamos en un rincón acogedor de este bello lugar, después de saciar el estómago y de una tertulia llena de historias y de risas nos ponemos en marcha hacia el hotel pasando por nuestra calle especial, la cual te permite caminar a 45 grados con respecto al suelo,( tiene una pendiente...que te cagas) bueno es difícil entenderlo si no lo veis.

Un nuevo día se abre ante nosotros y las condiciones son totalmente diferentes a las de ayer,
llegamos al aeródromo y después de repostar, llega la hora de volver a casa haciendo un par de altos en el camino.
Salimos de Lumbier dirección sur después de hacer un poco de ladera en la zona de los molinos y alcanzar una altura segura con Juan Carlos de líder, Josep de número dos y nosotros como número tres.

Continuamos rumbo sur hasta que después de dejar atras las montañas llegamos a la planicie de Huesca donde cambiamos de rumbo girando hacia el este rumbo a Barbastro.

El vuelo fue perfecto, el viento nos ayudaba a alcanzar nuestra meta y después de alcanzar la vertical de Barbastro dimos una vuelta rodeando la población.

Una vez que volvimos a formar el grupo después de la vuelta, pusimos rumbo a Alfes donde pensábamos 

parar a comer, yo necesitaba un poco de gasolina y la persona que se encarga del bar se ofreció a llevarme a la gasolinera después de comer, que por cierto quiero deciros que la gente que lleva el bar lo hace muy bien y os lo recomiendo a todos.
Despegamos y pusimos rumbo a Igualada, con viento en cola, Juan Carlos me cede la posición de líder y una vez reagrupada la patrulla después del despegue ponemos rumbo a casa, el vuelo, que voy a contaros!, la velocidad en estas condiciones entre 80 y 100 millas una maravilla.

Pasados unos 45 minutos Igualada a la vista y el grupo de tres aeronaves toma tierra operando por la 35, guardamos los cacharros y en el bar social del aeroclub Igualada-Ódena soñamos con la próxima salida delante de un café. Gracias compañeros por los momentos que pasamos juntos y por los sueños que compartimos.

PATXI. (Igualada)